Sanoja: Silvio Rodriguez. Emilia.
Emilia, tus ruinas las lei con buena voz,
tienen puertas como tu.
Que ridiculas mis cartas,
que ridiculas las sombras de mis suenos.
Que bien te recuerdo llorando.
Emilia, has ido junto con cada oracion,
escondida en un baul
como un signo inevitable,
y hay anecdotas tirandome del ceno.
Que bien te recuerdo llorando.
Que dira tu instinto cuando sienta esta cancion
y que diras tu, que te acercas
a la maxima distancia entre nosotros.
Quien conoce que un soldado moribundo te cantaba,
que hubo olores de una selva,
que habia cines,
que llovia.
Vallejo asi nos descubrio,
Byron estaba en su lugar.
Todo pasaba con nosotros.
Emilia, que horriblemente hermoso
era aquel tiempo.
Emilia, que pasa,
cual resaca nos llevo al silencio,
a recordar.
Algun viento nos ha dado
y en sus puntas
discutimos con la muerte:
que no te sorprenda llorando,
Emilia.
tienen puertas como tu.
Que ridiculas mis cartas,
que ridiculas las sombras de mis suenos.
Que bien te recuerdo llorando.
Emilia, has ido junto con cada oracion,
escondida en un baul
como un signo inevitable,
y hay anecdotas tirandome del ceno.
Que bien te recuerdo llorando.
Que dira tu instinto cuando sienta esta cancion
y que diras tu, que te acercas
a la maxima distancia entre nosotros.
Quien conoce que un soldado moribundo te cantaba,
que hubo olores de una selva,
que habia cines,
que llovia.
Vallejo asi nos descubrio,
Byron estaba en su lugar.
Todo pasaba con nosotros.
Emilia, que horriblemente hermoso
era aquel tiempo.
Emilia, que pasa,
cual resaca nos llevo al silencio,
a recordar.
Algun viento nos ha dado
y en sus puntas
discutimos con la muerte:
que no te sorprenda llorando,
Emilia.
Silvio Rodriguez