con sangre en las manos y huellas en el arma. La carne, la carne fue quien nos arrastro al dolor, y en carne, con sangre, hoy, se paga el precio como
negara con sangre en las manos y huellas en el arma. La carne, la carne fue quien nos arrastro al dolor, y en carne, con sangre, hoy, se paga el precio